El sector de Sanidad de la FeSP de UGT Castilla y León exigió hoy a la consejera de Sanidad, Verónica Casado, que trabaje los consensos y no imponga “adhesiones ciegas” en un “asunto tan serio” como el cambio de modelo de la atención sanitaria en el medio rural y la acusa de no querer escuchar.
En un comunicado, el responsable del Sector de Sanidad de la FeSP de UGT Castilla y León, Miguel Holguín, insiste en que el plan de la Consejera lleva implícito el cierre de facto de los consultorios locales y la puntilla para nuestra España Vaciada.
Además, pide que se sea “cuidadoso” con las políticas de recursos humanos que se quieran implantar para no contribuir a la fuga de los escasos profesionales que nos quedan en el Sistema Público porque “nunca la gaseosa nos puede salir tan cara”.
“No se quiere escuchar, y cuando no se quiere escuchar, pues no se escucha”, critica el respondable ugetista, quien recuerda a la consejera que está a “tiempo de abandonar su posición kamikaze” como la dicen “la mayoría de las voces” del mundo sanitario, social y político.
Según UGT, Casado entiende el consenso en el “seguiré avanzando con quiénes quieran avanzar conmigo” por lo que la augura, “sin ser presuntuosos, un corto y solitario recorrido”. Así, señala que sus apoyos son el Colegio de Médicos de Valladolid, tres sociedades científicas y “suponemos” que el partido C’s, si es que sigue siéndolo después del “bochorno” manifestado por el anotador señor Igea.
“Pobres números sin duda para un plan con tantas pretensiones de ser genial”, valora Holguín, que alerta de los planes que vienen, anunciados como “reformistas”, como en la Atención Continuada en Atención Primaria Urbana o en la Atención Hospitalaria.