energía

Del Olmo atribuye el cierre de Compostilla a una decisión “errónea y no meditada” del Gobierno

La consejera exige al Gobierno “alternativas industriales potentes” para las cuencas y un plan que regule el cierre de centrales térmicas, y a Endesa que “no abandone la zona”
La consejera de Economía y Hacienda, Pilar del Olmo (C), durante la reunión con alcaldes de municipios afectados por el cierre de explotaciones mineras y centrales térmicas, entre ellos del de Villablino, y la comisionada del Plan de Dinamización Económica de los Municipios Mineros. / C. Sánchez

La consejera de Economía y Hacienda, Pilar del Olmo, atribuyó hoy el cierre definitivo de la central térmica de Compostilla de cara al año 2020 a una decisión “errónea y no meditada” del Gobierno, que habría “arrastrado” a la empresa a confirmar hoy la clausura de la mayor instalación de generación eléctrica de la comarca del Bierzo. “Revertir la situación va a ser difícil, el mal está hecho”, aseguró Del Olmo, que exigió al Ejecutivo que ponga en marcha “alternativas industriales potentes” en las cuencas.

Después de que Endesa confirmara en la mañana de hoy el cierre en 2020 de la central térmica situada en Cubillos del Sil, la consejera lamentó que el Gobierno haya dado “los pasos precisos” para propiciar esta situación. En ese sentido, criticó la “subida artificial” del precio carbón provocada por la eliminación del céntimo verde al gas o la “precipitación” de la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, tanto en sus declaraciones como en sus decisiones.
Igualmente, lamentó que no exista “ningún plan para el cierre de las térmicas” y recordó que en la actualidad más del 20 por ciento del mix energético tiene su origen en el carbón “¿Quién va a producir esa energía en el futuro?”, se preguntó la consejera, que recalcó que “es más barato invertir en la desnitrificación que hacer centrales nuevas”.

Así, afirmó que la administración autonómica “trabajará con Endesa para que no abandone la zona” una vez se produzca el cierre de la central térmica. Tras reunirse con los alcaldes mineros del Bierzo y con los representantes de la plataforma de empresas auxiliares de Compostilla, la consejera reclamó también el mantenimiento de la central térmica de La Robla, propiedad de Naturgy y situada en el municipio homónimo.

En ese sentido, Del Olmo recordó que, a diferencia de lo ocurrido en las centrales de Anllares y Compostilla, sobre la central de La Robla no pesa ninguna decisión de cierre. Al respecto, exigió al Gobierno que ponga en marcha “actuaciones inmediatas” para garantizar la supervivencia de la instalación.

Respecto a Compostilla, Del Olmo valoró la “disposición” de Endesa para llevar a cabo una serie de inversiones que permitan mantener el nivel de empleo en la comarca. “Tiene que haber actividad económica suficiente para que las empresas auxiliares se queden en la zona”, afirmó la consejera antes de reunirse con la plataforma que representa a estos 180 operarios.

Entre las “alternativas” planteadas para mantener la actividad en Compostilla más allá de 2020, fecha en que Endesa desconectará la central de la red de generación, la consejera citó la posibilidad de que la térmica utilice “otras fuentes de energía, como el gas”.

Tras analizar la situación del sector junto a los regidores afectados, Del Olmo también anunció la puesta en marcha de “medidas específicas para incentivar la economía alternativa” en las comarcas del Bierzo y Laciana. En ese sentido, remarcó la apuesta del Ejecutivo autonómico por el uso de energías renovables.

La consejera de Economía y Hacienda, Pilar del Olmo, durante la reunión con el Comité de Empresa de la central térmica de Compostilla y representantes de sus compañías auxiliares. / César Sánchez