La Central Sindical Independiente y de Funcionarios -CSIF- se concentró este jueves a las puertas del Centro Sociosanitario ‘Valle de Laciana’ siguiendo la convocatoria que se llevaba a cabo en toda Castilla y León.
Silvia Mozo, delegada sindical de CSIF, dio lectura al manifiesto, en el que denunció “el caos sanitario” que sufren los profesionales de la Sanidad, y el “continuo deterioro de nuestro Sistema de Salud”, que afecta directamente a “todos los pacientes de la Comunidad y a la calidad de los servicios que prestan”.
Pidió el retorno a la jornada legítima de 35 horas semanales, “firmada en acuerdo con la Junta de Castilla y León en 2019 sin que a fecha de hoy se haya hecho efectiva”. Los casi cuatro años de retraso en su aplicación “califican por sí solos la consideración que esta administración guarda a este colectivo cansado y sobrecargado”.
La situación en la Atención Primaria, continuó diciendo, “es límite, con una carga de trabajo agotadora e inasumible, con citas para los ciudadanos que oscilan entre los cinco y los quince días en los centros de salud de la Comunidad”. La falta de médicos y enfermería en Atención Primaria resulta “clamoroso”, defendió. Respecto a las plazas MIR de facultativos, Mozo señaló que “no se cubren en Castilla y León, especialmente en las provincias más periféricas y cuando terminan, muchos se marchan. La Junta es incapaz de retenerlos”.
Reclamó, además, la “adecuación de las plantillas” ya que la falta de sanitarios en Urgencia “se cuenta por docenas en los hospitales”. El sistema sanitario de Castilla y León necesita -precisó- de “al menos 2.000 profesionales de medicina y 4.500 de enfermería, además de otros profesionales técnicos de unidades de apoyo”.
Ante este escenario, CSIF trasladó “el desánimo de todos los profesionales de Sanidad, que podemos concluir en lo que denominamos las tres “DES‟: descontento, desmotivación y desaliento”, terminó diciendo.