Tiempo de catarsis

La conformación del acuerdo entre el Partido Popular y Ciudadanos para gobernar la Junta de Castilla y León ha provocado girones en ambas formaciones. Por un lado, el PP ha tenido que arrodillarse ante peticiones inauditas cediendo alcaldías y diputaciones a su obligado socio de gobierno. La sensación en «provincias» es la de haber cedido excesivamente y dejado abiertos frentes de injusticias a varias carreras políticas y a campañas electorales disputadas en buena lid. Por otra parte, Ciudadanos en Castilla y León se había escorado claramente a la izquierda de su supuesto centro, y eso ha provocado que pactos y contrapactos antinatura se lleven a cabo en muchos municipios donde no se ha seguido una línea igual en toda la región. La sensación del sálvese quien pueda es francamente notoria siguiendo la prensa regional.

En el PP las heridas se lamerán y después de un tiempo la catarsis obligada tras años de Herrera y de Rajoy se supone curarán y saldrá un centro derecha reforzado aunque de menor tamaño y fuerza que el actual. A empezar de nuevo. Algo que ha tenido que hacerse en dos ocasiones en la historia del centro derecha español, una con Fraga y otra con Aznar.

En donde vemos más complicado el futuro es en Ciudadanos. Partido nacido de la supervivencia española frente al independentismo y casi diríamos persecución social a todo lo español en Cataluña, extendió su influencia al resto de España por las debilidades que presentó el PP en temas tan importantes como el independentismo y la estrambótica lucha por la sucesión de la presidencia popular. Rivera pudo ser en un momento dado el líder que necesitaba la España de centro y de la derecha, pero sus pactos con el PSOE y más tarde su ambigüedad a lo largo y ancho del Estado le han colocado claramente como tercera fuerza con techo en el panorama político nacional. Cosecha propia. Se nos asemeja cada día más al CDS, que tras ser tercera fuerza pactó aquí y allí para ser definitivamente diluido o absorbido en mayor parte por una inteligente política de JM Aznar, aunque algunos miembros, como Luis Aznar, preferían pactar con el PSOE al principio pero luego el intercambio de fichas con la alcaldía de Madrid para Rodríguez Sahagún se lo desbarató.

ABC

Print Friendly, PDF & Email