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El consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, instó hoy a la ministra de Transición Ecológica y Reto Demográfico, Teresa Ribera, a tomar decisiones respecto a la protección del lobo con “sensatez” y no por “intereses ideológicos”, y le recordó que Castilla y León, Asturias, Cantabria y Galicia, que poseen el 98 por ciento de la población lobera, no contemplan aprobar una normativa más garantista de la que establece Europa en sus directivas de hábitats, porque está «perfectamente conservada».
Suárez-Quiñones se refirió a la posibilidad de que el Ministerio que dirige Teresa Ribera pueda incluir al lobo, a petición de la Asociación para la Conservación y Estudio del Lobo Ibérico y Ecologistas en Acción, en el Listado de Especies Silvestres en régimen de Protección Especial (Lesrpe).
Ante esta posibilidad, no vinculante, el consejero reseñó que en Castilla y León la especie está perfectamente conservada e incluso ha logrado ubicarse en territorios no históricos, es decir, que antes no ocupaban.
Para Suárez-Quiñones, que garantizó que las cuatro comunidades autónomas con población de lobo en España darán la batalla para regular las poblaciones del depredador, una protección mayor para este animal supondría “un ataque absoluto a sus intereses generales, al desarrollo rural y a sus ganaderos”.
Es por ello que recordó a la ministra del ramo que no existe ninguna razón de conservación en la propuesta de los ecologistas y le invitó a primar los intereses generales de los ciudadanos de estas cuatro comunidades por encima de los intereses ideológicos de determinados colectivos ‘verdes’.
