LacianArt deja su legado artístico en la comarca

Las jornadas LacianArt han dejado su legado artístico en la comarca. En esta primera edición, la iniciativa cultural promovida por María del Roxo, Silvia Gándara, Anay Marín y Lidia de la Villa, se trasladó a la propia naturaleza en forma de Land Art. El objetivo final era, tal y como confesó Anay Marín, «sacar el arte de las tradicionales salas de exposiciones y llevarlo a un entorno natural». Primer objetivo cumplido, que a la vez logra un doble fin, «poner en valor la riqueza natural de la comarca».

El punto elegido ha sido el camino natural entre Rioscuro y Villaseca. Concretamente a la salida de la primera pedanía. Valiéndose de lana virgen, Anay Marín y Carmen Madreña Roja llevaron a cabo dos creaciones artísticas. La primera de ellas son tres crisálidas, de gran tamaño, cubiertas por este material e integradas en un árbol. La segunda obra, bautizada con el nombre de ‘El Cuelebre de Rioscuro’, se sitúa a un lado del camino natural. «Es una culebra gigante que se desliza por un prado cual rebaño trashumante», matizó Marín.

Utilizar lana para las creaciones no ha sido una decisión tomada al azar. «Quisimos dar un nuevo uso a este noble elemento que hoy en día, generalmente, termina en la basura» y asimismo «poner el foco en la actividad pastoril» que «prácticamente se encuentra extinta», puntualizó Anay Marín.

Las intervenciones de Land Art, continuó diciendo, «tienen un carácter efímero y se van transformando con el paso del tiempo, de las condiciones climatológicas y del entorno», hasta quedar «plenamente integradas en él».

Las jornadas de LacianArt, además, también recalaron, con el apoyo de la concejalía de Cultura del Ayuntamiento de Villablino, en uno de los muros exteriores del polideportivo municipal de Villablino, donde un grupo de voluntarios compuesto por siete personas, coloreó el lema ‘Somos arte’ y dibujó las siluetas de tres osos pardo en diferentes formas, tamaños y colores.

Las conclusiones de LacianArt

El pasado jueves daban comienzo las jornadas de LacianArt. Lo hacían con la inauguración de la exposición colectiva que permanecerá abierta hasta el 31 de agosto de miércoles a domingo en horario de 12:00 a 14:00 y de 18:00 a 20:00 horas. La iniciativa se clausuraba el pasado domingo después de cuatro días intensos de ponencias, que contaron con la presencia de, entre otros, el pintor lacianiego-babiano Manuel Sierra, pintura colaborativa, taller de nuno, land art, concurso de pintura al aire libre, mercadillo de arte y actuaciones musicales.

Las organizadoras, haciendo balance, se mostraron «muy satisfechas con el resultado, aunque ha sido un gran esfuerzo por nuestra parte», admitieron, a la vez que pusieron el acento en la respuesta positiva de los asistentes a las jornadas y los visitantes a la exposición. «Muchos han quedado sorprendidos con la calidad de las obras expuestas», confesaron.

La iniciativa supone «una gran oportunidad para los artistas de dar a conocer su obra al público y para todos los vecinos y visitantes de acercarse al mundo del arte y de disfrutar de un espacio tan maravilloso como es la Casa de Sierra Pambley». Ahora las promotoras de LacianArt desean que las jornadas «tengan el apoyo necesario para darles una continuidad». Que así sea.