Al igual que sucedió el año pasado, obviamente, la emblemática procesión del Cristo de los Mineros que se celebra en la localidad lacianiega de Caboalles de Abajo, no podrá llevarse a cabo debido a la situación sanitaria generada por la COVID-19. Tampoco habrá ningún acto público, tal y como ha anunciado la propia Cofradía este mismo sábado.
Quien no faltará a su cita con la Semana Santa es el sonido de la sirena del Pozo María que recuperó «su voz» en el año 2018. Este dispositivo sonará, tal y como comunica la Cofradía, «a la hora de la entrada de los relevos a la mina». También, el Viernes Santo, jornada en la que debería celebrarse la procesión del Cristo de los Mineros, a la hora en la que tendría que comenzar la procesión, las 20:30 horas, «sonarán las sirenas de Caboalles de Abajo».
Y en lo alto del castillete del pozo María, la cruz iluminada recordará a los vecinos de Laciana que, aunque no lo parezca, es Semana Santa. Como también lo fue el año pasado, cuando en Viernes Santo el sonido de las marchas procesionales de la banda de cornetas y tambores del Cristo de los Mineros, se oyó por las calles de la localidad a través de megafonía. Para honrar a su Cristo.